Continuamos a Scarborough la bulliciosa y ruidosa capital de esta isla. Ciudad caotica y descuajeringada, casas destartaladas, caos circulatorio con gente alegre en sus calles. La música es el latido del Caribe y es dicifil no notar su presencia. En las calles suena estridente, a todo volumen los compases del Calipso, del reggae, del dub o del steel pan.
Continuamos navegando hasta Pigeon Point, un precioso lugar en la parte de sotavento de esta isla, pero aun así el oleaje y el viento hacen difícil el fondeadero.
Despedimos a Pilar y Alejandro que nos han estado acompañando desde Canarias y dejamos a esta ventosa isla.
La travesía hasta Granada ha sido dura, la más difícil desde nuestra partida. Durante toda la noche el alisio soplo con mucha intensidad, acompañado de violentos chubascos de lluvia y fuerte viento, en donde el anemómetro registraba entre 40 y 45 nudos de viento permanente, lo que hacía muy difícil llevar la vela adecuada, o bien íbamos cortos o bien pasados de vela. Al final cansados y maltratados decidimos navegar solo con la trinqueta, y aún asi nos permitia hacer 7 nudos de velocidad.
Granada enclavada en las pequeñas Antillas, pertenece a las Windward o islas de barlovento, expuestas a los vientos alisios. Conocida como la isla de las especies, Colon le dio a esta isla el nombre de Concepcion en 1498 cuando la descubrio, pero los marineros espanyoles nostálgicos de la tierra del sur de Espanya , la bautizaron mas tarde como Granada. Famosa en los años ochenta por la invasión de los marines de los Estados Unidos enviados por Reagan para derrocar al gobierno procubano e instaurar en la isla un gobierno mas afin a sus intereses.
Fondeamos en St George, la capital de esta isla estado, en su protegido lagoon interior a los pies del centro histórico.
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